Vecinos de Santa Brígida continúan su lucha contra los coches mal aparcados

Desde que el Ayuntamiento de Madrid reformara once calles de Chueca y apostara por el diseño de plataforma única los vecinos de la calle Santa Brígida se encuentran cada día con el mismo problema: coches y furgonetas que aprovechan la ausencia de bordillos para estacionar encima de la acera.

Una incívica costumbre penalizada por la normativa de movilidad municipal que, además, se transforma en un problema de accesibilidad para personas con discapacidades visuales, que no pueden advertir la presencia de los vehículos en un espacio por el que solo deberían transitar los peatones.

Así, durante prácticamente todo el día, muchos de los peatones que utilizan la calle Santa Brígida se encuentran con que su camino está bloqueado por algún tipo de vehículo y no les queda más remedio que caminar por la calzada, por donde circulan los coches, con el riesgo que ello supone.

Hasta el momento todas las solicitudes de instalación de bolardos en esa vía del barrio para evitar que los coches estacionen inadecuadamente han sido denegadas, pero los vecinos no desisten en su reclamación de una solución para que pasear por Santa Brígida no sea un peligro.

Por ello, a través de las redes sociales, continúan compartiendo imágenes como las que acompañan a esta noticia en las que se puede ver a infractores (tanto profesionales del reparto como particulares) que se suben a la acera para cargar y descargar el maletero y reclamando al Ayuntamiento que se replantee la necesidad de colocar algún tipo de elemento que disuada a los conductores de aparcar mal.