El “Hogar de Oportunidades de la Mujer”: antídoto contra el “sinhogarismo” femenino

La Iglesia de San Antón ya tiene en marcha su próximo proyecto: el “Hogar de Oportunidades de la Mujer”. Una iniciativa que, como el “Hogar de Oportunidades para jóvenes” que desde principios de año funciona en Chueca, supone un nuevo comienzo para mujeres en situación de calle.

Así lo ha explicado esta tarde Natalia Barber, Responsable del Hogar y Trabajadora Social de la Iglesia de San Antón, en una de las jornadas organizadas por San Antón para celebrar el Día Internacional de la Mujer, en la que la teóloga Pepa Torres ha ejercido como pregonera.

Barber ha explicado que más de 4.500 mujeres carecen de vivienda. Una situación que las convierte en un colectivo especialmente vulnerable y en riesgo de exclusión. Con este “Hogar de Oportunidades de la Mujer”, que se inaugura mañana, Mensajeros de la Paz proporcionará una segunda oportunidad a mujeres sin hogar.

Un piso con el que no solo tendrán un techo bajo el que dormir. También dispondrán de un entorno seguro donde poder desarrollarse como personas y despreocuparse de dónde dejar sus pertenencias.

“Siempre les preguntamos, ¿dónde te sueñas?”, ha destacado Barber, quien también ha aclarado que el equipo que las acompaña y supervisa les facilita todo lo que necesitan para que sean las mujeres que quieren ser. Un trampolín para comenzar una nueva vida de manera independiente al calor de un hogar.

En concreto, el piso tiene tres habitaciones, todas ellas con literas, lo que permite ampliar el número de mujeres que pueden acceder a esta nueva oportunidad. También un salón amplio, zonas para el aseo personal, una cocina donde poder comer juntas y otros espacios donde las residentes hacen vida común, como cualquier otro hogar.

Una de sus nuevas residentes, Paz, ha dado un impactante testimonio de cómo pasó de trabajar en un restaurante en la zona de Huertas y tener un piso a verse en la calle y con un niño que, debido a su situación, ahora vive en una casa de acogida.

Tras pasar por albergues, donde nunca llegó a sentirse cómoda, y después de seis meses viviendo en la calle, ha encontrado en San Antón su segundo hogar. “Gracias a Mensajeros de la Paz encontré una salida”.

También ha contado cómo acaba de ser madre de una niña prematura que, por el momento, está en una familia de acogida de emergencia.

Emocionada, ha confesado que espera que esta situación cambie pronto gracias al “Hogar de Oportunidades de la Mujer”, donde podrá vivir, y al contrato para trabajar en una tienda de ropa que acaba de conseguir.

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