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Encierro en el Teatro Barceló para tratar de evitar cierres de discotecas y bares de copas

Imagen de archivo de la fachada del Teatro de Barceló | LUIS GARCÍA (ZAQARBAL)

Somos Chueca

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Empresarios del ocio nocturno de toda España estaban llamados esta pasada noche a encerrarse en distintos locales para exigir al Gobierno la ampliación de los ERTE de su personal por Covid-19, que finalizan la semana que viene sin saber si se ampliarán para este sector, y para solicitar plan de rescate para sus negocios.

En Madrid la protesta se convocó en el Teatro Barceló, donde entre las 19.00 horas del miércoles y las 7:00 de este jueves se sucedieron los encierros de disc-jockeys, camareros, relaciones públicas, animadores y directores de sala de distintos locales, en grupos de seis personas, en cumplimiento de las medidas sanitarias exigidas por la Covid-19.

Secundada especialmente en la capital por personal de bares de Chueca y de Malasaña, según recoge la agencia EFE, a las  puertas del Teatro Barceló se escenificó lo que sucedía en su interior encendiendo “velones junto a copas vacías, cervezas sin abrir, sacos de dormir y carteles de 'nuestro insomnio será vuestra peor pesadilla' o 'el virus no duerme por el día'”.

Esta concentración habría sido la primera de muchas, según el director de comunicación de Noche Madrid, Vicente Pizcueta. Por su parte, el jefe de mantenimiento del Teatro Barceló relataba que la situación de los más de 100 trabajadores de dicho establecimiento “no ven una salida a futuro” y que por eso piden un “rescate” para el ocio nocturno, donde no sólo hay empresarios.

La protesta, convocada por la federación España de Noche, se ha desarrollado bajo el lema 'Insomnio: nos habéis quitado el sueño'. Según esta federación, la pandemia ha provocado ya en todo el país el cierre de 6.200 locales de ocio y de los que aún resisten el 89% está cerrado al público. Según sus cálculos, sin ayudas se podrían “arruinar 17.000 empresas de las 25.000 que existían cuando empezó la crisis del coronavirus”.

En Madrid, un total de 647 locales ya han cerrado sus puertas, el 24,95 % de estos establecimientos, según datos de Noche Madrid y España de Noche. Para finales de año, estiman que se destruirán “más de 9.300 empleos directos, y el 69,29% de las pymes del sector del ocio y los espectáculos se arruinará, 1.800 del total de las 2.600 empresas que existían en la Comunidad cuando empezó la crisis del coronavirus”.

Los dueños de locales de copas reclaman ayudas para el pago de alquileres, bajada del IVA aplicable en su sector al 4%, suspensión de la cuota de autónomos y una moratoria en al devolución de los créditos pedidos al ICO.

En la región, discotecas y bares de copas (los que abrían hasta las 3.00 de la madrugada) permanecen cerrados desde que el ejecutivo de Ayuso decretara su clausura para intentar frenar la extensión de la pandemia. Muchos solo llegaron a funcionar con normalidad durante dos semanas: a la apertura a principios de julio le siguió rápidamente el recorte de su horario hasta la 1.00 de la madrugada, restricción que, en la práctica, hacía inviable su funcionamiento.

Por su parte, la hostelería madrileña ha declarado que no puede asumir más limitaciones sin que haya ayudas directas por parte de la Comunidad de Madrid y reclama un Plan de Choque “para la hostelería madrileña que ayude a la supervivencia a más de 12.000 pymes que estarán durante el otoño en peligro de quiebra, de las 32.000 pymes cuya actividad se desarrollaba a 1 de enero en nuestra región”.

Solicitan una cuantía de 1.000 € diarios para las pymes de las zonas sanitarias cuya movilidad se ha limitado recientemente, afectando también a la actividad de estos negocios: 4.200 establecimientos de hostelería ubicados en las 36 áreas acotadas por el gobierno regional.

“Pasan los meses y el sector de Hostelería en la Comunidad sigue perdiendo empleo. El Ministerio de Trabajo ha hecho público que la Comunidad de Madrid ha perdido 40.042 empleos hasta el mes de agosto de los 195.000 empleos existentes a principios de año. Esto supone una pérdida de un 20 %. En este momento la facturación del sector no supera en la Comunidad de Madrid el 40% de lo facturado el pasado año y el 90 % de las empresas nos encontramos en pérdidas”, argumentan los hosteleros para justificar su SOS.

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